Esperando pacientemente la fecha de mi partida, sin darme cuenta que hace tiempo me marche sin dar explicaciones ni decir donde iba. Me fui, sin tener a donde ir.
Empese a caminar por las calles solitarias y vacias en noches frias y humedas. A caminar bajo la lluvia, a llevarle la contraria al viento y a mojarme los pies en los muelles. Atravesando las arenas de los desiertos, escalando montañas y cruzando mares.
Empese mi travesia hacia lo desconocido durante la noche y descanso durante el día para poderme esconder de las falsedades de la vida. Aun conociendo los peligros de la noche me arriesgo porque pienso que es mejor ser herido por un pobre desconocido que por un gran conocido.
No se hasta donde mis pies me llevaran pero espero que sea a un lugar mejor.
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